Una buena argumentación va más allá del contenido del mensaje

¿Quiere integrar un nuevo sistema, abogar por un horario de trabajo más flexible o, en general, convencer a sus empleados con sus propios argumentos? Entonces ha venido al lugar indicado, porque aquí aprenderá a argumentar con plena convicción. Al fin y al cabo, lo que cuenta no es solo el contenido de los argumentos, sino también la forma en que los transmite. Y no solo en persona, sino también en el espacio virtual debido a la creciente digitalización y al teletrabajo.

Transmisor y receptor

Cuando las personas se comunican entre sí, intercambian mensajes. Por lo que se convierten en transmisores y receptores. El emisor comunica un mensaje al receptor, que lo descodifica e interpreta. Solo entonces el receptor puede reaccionar al mensaje y enviar una señal, convirtiéndose así en un transmisor. Los transmisores pueden elegir entre diferentes canales de comunicación:

La comunicación verbal: se trata del lenguaje real hablado o escrito

La comunicación paraverbal: es el tipo de articulación (por ejemplo, el tono de voz o el volumen)

La comunicación no verbal: es decir, las expresiones faciales, los gestos y la postura corporal

Tenga muy presentes estos aspectos para lo que se avecina.

Una buena preparación siempre da sus frutos

Una buena preparación tiene que ver tanto con el contenido como con la comunicación interpersonal. De este modo, deja claro que la conversación con su interlocutor es importante para usted y que le interesa el tema que están tratando. Su interlocutor responderá más abiertamente a sus preocupaciones.

Para poder mostrar una actitud convincente tanto en línea como en persona, siga estos 3 importantes consejos que le ofrecemos y con los que ya puede empezar a prepararse:

Moderación de las reuniones en línea

Situar la cámara a la altura de los ojos

Mantener un entorno de trabajo tranquilo y ordenado, y quizás tener un fondo de pantalla de una reunión virtual

Buena calidad de sonido

Reuniones presenciales

Ser puntual

Eliminar las distracciones (por ejemplo, debe apagarse el móvil)

Respetar las normas de comunicación

Convencer con el lenguaje

Al utilizar un lenguaje claro y comprensible, puede estimular la imaginación de su interlocutor, con lo que sus argumentos serán más fáciles de entender. Al exponer sus argumentos, evite especialmente términos técnicos, palabras extranjeras, abreviaturas y anglicismos. Asegúrese también de no emplear muletillas, ya que le harán parecer una persona insegura y no logrará convencer a su público. Estas son algunas muletillas o elementos del lenguaje que debe evitar:

Las palabras de relleno, como «bueno», «por así decirlo» o «pues».

Las relativizaciones, como «posiblemente».

Frases recargadas con tiempos verbales complejos.

Para ofrecer un lenguaje más ilustrativo, puede mencionar sus propias experiencias («Durante mis estudios...»), o hacer referencia a las de su homólogo («Estoy seguro de que sabe...») o hacer analogías al tema («Hemos elegido un procedimiento similar en el proyecto XY: ...»). De este modo podrá reforzar su poder de persuasión.

Bien dicho: consejos para utilizar el lenguaje en el espacio virtual

Dado que la comunicación verbal es el canal de comunicación número uno en el espacio virtual, debe seguir estas reglas para el uso del lenguaje:

Hable con la mayor claridad posible y elija un ritmo moderado.

Pregunte con frecuencia si todos han entendido sus argumentos, porque a menudo no se pueden ver las caras de los participantes.

Sea claro a la hora de exponer sus argumentos, es decir, vaya al grano.

Acuerde las normas de comunicación para el espacio digital. Por ejemplo: mientras una persona habla, todas las demás tienen que tener el micrófono apagado. El que quiera decir algo debe levantar la mano.

Convencer con la actitud interior y exterior

Si utiliza correctamente su actitud exterior, también puede aumentar su seguridad interior. Preste especial atención a sus expresiones faciales, gestos, postura y voz. Intente mantener por lo general una expresión amistosa y sonreír de vez en cuando a su interlocutor. Además, utilice sus gestos de forma selectiva. En el espacio analógico, los movimientos grandes tienen un efecto positivo, mientras que en el espacio virtual son los movimientos más pequeños los más ventajosos. Recuerde que debe sentarse o ponerse de pie con la espalda recta y utilizar su voz para exponer sus argumentos de forma convincente a través de la entonación o el volumen. Sin embargo, no se olvide de que:

Un carisma convincente es el resultado de una actitud interior positiva.

Así es cómo puede promover una actitud positiva:

Imagine que va a desempeñar un buen trabajo en lugar de predecir su propio fracaso.

Sustituya las autoafirmaciones negativas por otras positivas.

¿Quién le apoya y quién es crítico con usted? Identifique a las personas para encontrarse con ellas a la altura de los ojos y promover un intercambio constructivo.

Concéntrese en lo que le entusiasma del tema en cuestión.

He tenido un bloqueo, ¿y ahora qué?

¿A quién no le ha pasado alguna vez? Hace un momento estaba superconcentrado en el tema que le ocupa, pero de repente se siente en completa desconexión y su cabeza ya no da para más, no llegan ideas ni puede continuar. No se preocupe, es un fenómeno totalmente normal. Incluso si tiene un bloqueo, podrá seguir actuando de forma convincente. Con la ayuda de varias estrategias, puede evitar la aparición de un bloqueo justo a tiempo, o encontrar la forma de salir de él si ya se ha producido.

Utilice un esquema que haya escrito previamente para poder volver a encontrar sus argumentos.

Anule el bloqueo mental: haga una pequeña pausa, resuma lo que ha mencionado antes o empiece de nuevo.

Inhale y exhale profundamente de forma consciente.

Interactúe con el público haciendo preguntas: «¿Han podido seguir la presentación hasta ahora?»

En caso de que el estatus no importe, sea sincero y admita abiertamente que ha tenido un bloqueo.

En pocas palabras:

Una presentación convincente requiere tanto argumentos que convenzan por su contenido como por su capacidad de persuasión personal.

Una buena preparación, una voz fuerte, un lenguaje claro y comprensible expresado en un buen tono, un lenguaje corporal seguro y una actitud interior y exterior positivas contribuyen a una gran capacidad de persuasión personal.

Con las estrategias adecuadas logrará convencer a su público incluso en caso de que tenga un bloqueo.

Para poder parecer convincente, también es ventajoso mantener su nivel de estrés personal bajo control. ¿Necesita ayuda? No hay problema. Haga clic aquí para mejorar su gestión del estrés.